Desde hace quince años, el establo activo es un concepto cada vez más popular en Austria y Alemania. Se trata de una alternativa mucho más cercana a la forma en que viven los caballos en su estado natural, y goza de gran popularidad. En vista de la moda general, el concepto de establo activo se está introduciendo gradualmente en Francia.
¿Qué es un establo activo?
Un establo activo se inspira en el comportamiento de los caballos en su estado natural. En su entorno natural, el caballo vive en manada y se desplaza todo el día para satisfacer sus necesidades. Necesita alimentarse, tener fácil acceso al agua y resguardarse de los elementos (calor, viento, frío). Por término medio, recorren entre 10 y 15 km al día. Por ello, el concepto de establo activo se basa en este estilo de vida nómada. El caballo dispone de diferentes espacios interiores y exteriores en función de sus necesidades. El caballo es libre de elegir su propio espacio, en función de sus necesidades inmediatas. El establo activo tiene un plan muy preciso, para ofrecer al caballo un recorrido a lo largo del día.
En cuanto a la alimentación, el heno se ofrece en estanterías y se pueden instalar comederos automáticos para distribuir las raciones de pellets. Esto significa que los caballos son completamente autosuficientes en lo que respecta a la alimentación. Puede mantener sus pellets habituales en un establo activo. Por ejemplo, puede utilizar el pienso multipartícula para caballos S250, que es adecuado para muchos caballos y para la actividad que producen los caballos en un establo activo.
El concepto paddock paradise sigue las mismas pautas que los establos activos. Su objetivo es acercarse lo más posible al comportamiento natural del caballo. Sin embargo, este concepto es un poco menos técnico que el del establo activo, que contará con más “logística” para gestionar la rutina diaria, como el suministro de raciones, los sistemas automáticos, la estabilización de los suelos, el mantenimiento de las distintas zonas, etc.
¿Cuáles son los beneficios del establo activo para el caballo?
Los beneficios para el caballo son inmediatos, ya que el establo activo y el paddock paradise respetan las necesidades fisiológicas del caballo. El propio concepto de establo activo permite estimular a los caballos y apelar a su pensamiento.
Por el contrario, cuando los caballos viven en un establo “clásico”, se distorsiona su comportamiento original. Por ejemplo:
- Un caballo encerrado en un box no puede moverse libremente. Sin embargo, la locomoción permite una buena circulación sanguínea, una buena función muscular y una buena digestión.
- La comida se condensa en 2 o 3 comidas de media (según los establos) mientras que el caballo tiene un estómago pequeño. Por lo tanto, debe ingerir comidas más pequeñas a lo largo del día.
- Los caballos, separados por las paredes de sus boxes, se relacionan poco socialmente.
Esta forma de vida antinatural puede provocar problemas de salud y estrés a los caballos, ya que va en contra de sus necesidades.
¿Cuánto espacio se necesita para un establo activo?
Superficie general
Como los caballos tienen que recorrer una ruta todos los días, se necesita espacio. El tamaño del establo activo dependerá principalmente del número de caballos de la manada. En general, se recomienda disponer de unos 100 metros cuadrados por caballo en una zona estabilizada (zona de movimiento), sin contar el edificio. Esta superficie puede aumentarse si la manada está formada por caballos “vivos” (por ejemplo, purasangres o caballos de deporte). Los sementales no se recomiendan en una manada estabulada activa, a menos que se trate de un semental y su harén de yeguas. Fuera de estas zonas, también deben tenerse en cuenta los metros cuadrados necesarios para el alojamiento nocturno o de descanso. La media es de 10 a 12 metros cuadrados por caballo para esta zona de “dormir”.
Si desea construir un establo activo o un paddock paradisíaco para sus caballos, le aconsejamos encarecidamente que elabore un plano en función del espacio disponible.
Las dimensiones de las distintas zonas
- Las zonas de movimiento deben tener una anchura mínima de 6 metros para garantizar que todos los caballos puedan pasar entre sí, sin riesgo de conflicto.
- Las zonas de alimentación que incluyen heno deben tener entre 220 y 400 metros cuadrados (ya sea 15×15 o 20×20), con un radio de 7 metros alrededor de cada estante.
- Las distancias entre las distintas zonas de interés no deben ser demasiado grandes, sobre todo para evitar que los caballos más viejos se desplacen demasiado lejos. Es aconsejable que haya entre 30 y 50 metros entre las zonas.