¿Qué son las úlceras gástricas en los caballos?
El desarrollo de los caballos es un tema complejo, ya que pueden sufrir numerosas patologías durante toda su vida. En particular, muchos problemas de salud están relacionados con la digestión de los caballos. Muchos caballos pueden sufrir úlceras, independientemente de su disciplina (caballos de cría, caballos deportivos, resistencia, carreras, o simplemente retirados). Hay 2 tipos de úlceras:
Las úlceras situadas en la parte no glandular, denominada «escamosa», del estómago. Este tipo de úlcera se denomina en las publicaciones científicas ESGD (Equine Squmous Gastric Desease).
úlceras ubicadas en la parte glandular, su aparición está más bien relacionada con situaciones de estrés repetidas y/o la intensidad del trabajo solicitado. Se habla entonces de EGGD (Equine Glandular Gastric Desease).
Varios factores agravantes se han puesto de relieve en la aparición de úlceras, que están directamente relacionados con la gestión de la alimentación de los caballos, pero también con la composición de la dieta diaria.
- El primer factor es la ausencia de forraje: si los caballos reciben solo alimentos concentrados, en el mejor de tres al día, esto da lugar a largos períodos de «vacío estomacal». Hay que señalar que el caballo en su estado «natural» está acostumbrado a ingerir pequeñas cantidades de forraje durante unas 16 horas al día, lo que no deja lugar más que a breves períodos de vacío estomacal. Además, la parte baja del estómago tiene un pH más bien ácido (entre 2 y 4), lo que significa que cuando esta parte del estómago está vacía, la acidez ataca la pared y causa dolor porque la secreción ácida se produce continuamente en el caballo, incluso en ausencia de alimentos en el estómago. La masticación genera la producción de saliva, que normalmente contrarresta esta acidez al tener un efecto amortiguador real sobre el contenido estomacal, por lo que si el caballo no recibe una ración de forraje, no puede producir saliva.
- El segundo factor agravante para este tipo de úlcera es el contenido en almidón de la alimentación del caballo, es decir, su composición más o menos elevada en cereales. En efecto, cuanto más rico sea el alimento en cereales, mayor será la concentración de almidón. Hay que tener en cuenta que el caballo es un herbívoro, por lo que los cereales no forman normalmente parte de su alimentación en su estado natural. Éstas no están suficientemente provistas de amilasa, que son responsables de la buena digestión del almidón. La consecuencia de un exceso de almidón en la ración implica también una disminución del pH (acidez) por producción de ácido láctico, lo que genera un terreno favorable para la aparición de úlceras en las paredes «no glandulares» («no protegidas») del estómago.
En particular, los caballos de deporte a menudo son sometidos a un entrenamiento intenso, lo que requiere una dieta rica para satisfacer todas sus necesidades energéticas. Los estudios indican que entre el 55 y el 60% de los caballos deportivos tienen úlceras gástricas. Una alimentación equilibrada sería la clave para combinar el bienestar del caballo y el rendimiento deportivo. Ahora bien, muchos alimentos para caballos deportivos contienen cereales (porque son muy buenas fuentes de energía) y por lo tanto almidón, lo que puede provocar la aparición de úlceras de tipo ESGD, y por lo tanto de fuertes molestias para estos caballos. Por tanto, es importante dosificar en su ración la ingesta de almidón . Esta ingesta se explica en gramos por comida, y no en cantidad diaria. Esto puede permitirnos, al aumentar el número de comidas al día, aumentar si es necesario la proporción de almidón en la ingesta energética diaria.
¿Cómo reconocer los síntomas de úlceras en caballos deportivos?
Muchos signos clínicos pueden sugerir la presencia de úlceras gástricas en su caballo deportivo. En particular, si el apetito de su caballo se vuelve caprichoso (si no come su ración, clasifica sus alimentos, come lentamente…), si nota una pérdida de estado general, una disminución del rendimiento no explicada por otros factores físicos, un cambio de comportamiento (más agresivo, o falta de entusiasmo), cólicos de baja intensidad especialmente después de las comidas, dolores en el momento de la manteca, bostezos justo antes o durante la ingestión de alimentos… Tenga cuidado, sin embargo, la ausencia de síntomas no significa que su caballo no sufre de úlceras, algunos caballos no muestran signos de dolor externo.
¿Cómo prevenir la aparición de úlceras ?
Por lo que se refiere al posible tratamiento de las úlceras, se han formulado recomendaciones sobre los dos factores agravantes antes mencionados, tras la publicación de los resultados de ensayos científicos:
- En primer lugar, el forraje para caballos: el caballo debe recibir una cantidad mínima de forraje de 1,5 kg por cada 100 kg de peso vivo (por ejemplo, unos 7,5-8 kg de forraje por día para un caballo de 500 kg, que debe repartirse en al menos dos comidas)
- Limitar el aporte de almidón en la dieta de los caballos sustituyendo el aporte de energía carbídica (almidón) por el aporte de energía lipídica (de las materias grasas)
- No hacer trabajar al caballo inmediatamente después de la absorción de una comida de concentrados (si es posible hacerlo trabajar después de una comida de heno asimilada), y no darle alimentos concentrados inmediatamente después del trabajo.
- Salivación: una solución que también está demostrada es poder aumentar la salivación del caballo para contrarrestar la acidez del estómago. Esto puede hacerse a través de la ingesta de concentrados de fibra a marrón largo, tipo marrón alfalfa.
- Favorecer el aporte de prebióticos (levaduras vivas) y de ácidos grasos esenciales (omega 3 y omega 6)
En los casos más graves, el veterinario podrá prescribir tratamientos. Una gastroscopia puede ayudar al veterinario a establecer su diagnóstico y a posteriori a comprobar la eficacia de los tratamientos.
En términos de prevención de úlceras, es importante prestar atención a las condiciones de vida de su caballo. Su estilo de vida (box o pre) puede tener una gran influencia en la aparición de úlceras tipo EGGD. En particular, el encierro puede causar una situación de estrés muy fuerte para un caballo. Por lo tanto, será necesario adaptar su modo de vida para que pueda sentirse más satisfecho.
¿Qué comida darle a los caballos deportivos?
Como la nutrición de los caballos puede desempeñar un papel preventivo para las úlceras de la mucosa no glandular, Royal Horse ha razonado el aporte de almidón en todas las fórmulas de alimentos, esto nos permite no alcanzar el límite crítico de los aportes de almidón ( saturación del papel de las amilasas y producción de ácido láctico en el estómago) calculadas para una distribución en tres comidas al día. Una disposición que asegura, además de la presencia sistemática de prebióticos(M.O.S) en nuestras fórmulas, un confort gástrico a sus caballos.
Además de todas estas disposiciones Royal Horse en su ofrece una solución alimentaria específica para los caballos que sufren de úlceras que es cuya fórmula y fruto de numerosas investigaciones y recomendaciones sobre el tema: este alimento concentra todas las recomendaciones que acabamos de enumerar:
- Composición mixta con gránulos largos y marrones de alfalfa
- Contenido de almidón limitado al 10%
- Energía aportada por un alto contenido en grasa vegetal con una relación omega 6/ omega 3 óptima para su uso
- GWB (Gastric Wall Bulder), un principio activo a base de extractos vegetales para apoyar el confort gástrico.
Esta alimentación para caballos existe en forma de mezcla lista para el uso de gránulos específicamente formulados para combatir este tipo de problemas y el marrón largo de alfalfa.